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El sobrepeso, cansancio o falta de concentración, son solo algunos de los muchos problemas que pueden aparecer si nuestra alimentación no es la adecuada. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) asegura que una buena dieta aumenta nuestra productividad en un 20%. A continuación, os mencionamos una serie de consejos alimenticios que permitirán afrontar la jornada laboral con mayor energía y mejorar nuestro estado de salud.
- El desayuno es primordial. Si te saltas esta comida, el cuerpo te pedirá más comida luego y lo más seguro es que te des un atracón. Es muy importante que sea completo y que incluya fibra, fruta o algún lácteo.
- No abuses del café. Si ya lo has tomado para desayunar, a media mañana es aconsejable sustituirlo por frutos secos, que tienen un efecto saciante. Una elevada dosis de café puede provocar ansiedad, dolor de cabeza o hiperactividad.
- No piques entre horas. Tomar un vaso de agua te ayudará a evitar hacerlo. Si acostumbramos al cuerpo a beber agua cuando tenemos ganas de picar entre horas, dejaremos pronto de tener esa ansiedad.
- Come con tranquilidad. Esto nos ayudará a hacer mejor la digestión, desconectaremos del trabajo y evitaremos la somnolencia.
- Evita comer grasas y fritos. Incluye en la comida principal verduras, legumbres o pescado a la plancha.
- Realiza 5 comidas al día. Al realizar comidas más frecuentes, ayudarás al cuerpo a tener energía todo el día. Evitarás el cansancio, la fatiga y los dolores de cabeza.
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